POR QUÉ DEBES DECIRLE SÍ A LA SOYA
Gracias a sus propiedades nutricionales, la soya se ha vuelto muy popular entre personas que buscan cambiar sus hábitos alimenticios, buscando nutrir a su organismo con alimentos que potencialicen sus funciones.
Además, puedes disfrutar de sus beneficios en distintas versiones, como las bebidas y los granos de soya, que se comen cocidos, tostados o germinados. También puedes encontrarla en diversos productos que se derivan de ella, como aceite, pan, harina y tofu.
Por esto y más, sin lugar a dudas, la soya es una de las mejores legumbres que existen en el mundo, es una fuente de proteína tan buena, que está en el mismo nivel en cuanto a propiedades nutricionales que la carne; para algunos es mejor, ya que la soya carece de las toxinas que aparecen en la carne.
Además de esto, es rica en omega 3 y 6, ácidos grasos poliinsaturados y esenciales para el ser humano, ya que son grasas que debemos obtener a través de la dieta alimenticia, pues el organismo no es capaz de sintetizarlas.
Otro de los puntos a su favor, es que su consumo constante te ayudará a prevenir algunas enfermedades cardiovasculares, osteoporosis y síntomas de la menopausia. Por ejemplo, la soya negra es utilizada en la dieta macrobiótica (una tradición asiática para comer, está basada en el principio de equilibrio del Yin y Yang y consiste en una adaptación de las tradiciones culinarias de Extremo Oriente, donde alimentación, medicina e incluso espiritualidad, a menudo están relacionadas) para prevenir problemas en las vías urinarias y genitales.
También hay personas que la ingieren con regularidad para mejorar los movimientos peristálticos (aquellos que hace nuestro cuerpo, sobre todo, después de comer y que ayudan a nuestro aparato digestivo a vaciar la comida mediante la evacuación), por lo que tampoco tendrás problemas de estreñimiento.
Si quieres saber qué tan buena es la soya y por qué debes incluirla en tu dieta alimenticia, checa los siguientes porcentajes:
- La soya contiene entre un 38 y 40% de proteína.
- Alrededor de un 18% de grasas, en su mayoría poliinsaturadas y por su origen vegetal, no contiene colesterol.
- 15% de carbohidratos.
- 15% de fibra.
- 14% de agua.
Si todo esto te parece poco, la soya también posee una gran cantidad de minerales y vitaminas; además de que registra importantes niveles de calcio, hierro, magnesio, potasio, fósforo, vitaminas E y Complejo B.
*Sugerencia de uso. Las cantidades e ingredientes utilizados son criterio del consumidor.